Siempre quise tener uno. Debajo del vídeo explico el motivo.
A mediados de los 90 había sentimientos encontrados con el Twingo, porque el coche tenía un diseño singular para la época (eres más feo que un Twingo con las puertas abiertas era la frase de moda). Pero cuando Renault sacó la publicidad de los 2 luchadores de sumo durmiendo a pierna suelta dentro del coche, para muchos (como yo) dejó de ser un coche feo para convertirse en un objeto de deseo…
Sí amigos, los asientos se podían poner totalmente horizontales y convertirse en una señora cama para esas noches de pasión y descampado los fines de semana.