Otro episodio más de ‘el freno de mano, ese gran desconocido’. Si no hubiese sido por ese espejo y la rápida reacción de nuestro héroe, hubiese acabado en tragedia.
La próxima vez que te pidan un cígar, hazlo así
Menudo susto me dio el otro día el chino Juan (propietario del bazar de mi barrio) cuando sacó esto para fumar. [Aquí lo venden].