Nuestro protagonista nos muestra lo que a simple vista se ve y lo que no se ve desde la cabina del camión. El coche que tiene delante es un buen ejemplo. Afortunadamente, ese espejo ayuda a comprobar ese ‘punto negro’ de un vistazo.
Levantarte, tumbarte, relajarte, darte, desearte, besarte, gozarte, amarte, adorarte, lavarte, bañarte, secarte, pesarte… pues sí que da juego la terminación. Y si piensas mal ya ni te cuento.