Con la ayuda de una silla, nuestra protagonista va a hacer la buena acción del día rescatando una ardilla que se ha quedado atrapada en una piscina inflable. Espera al final…
Dice mi mujer (aterrada y subida en la encimera de la cocina), que se ha colado una ardilla en casa y que ahora mismo está en el baño. Imposible, pero bueno, miremos…