El mejor final que he visto jugando a las sillas musicales (También conocido como el juego de las sillas).
Se vino arriba escuchando Dirty Dancing Es inevitable. Escuchas ese temazo y haces la famosa escena con quien sea.
Así fue su cena de Acción de Gracias Llevo más de 20 años diciendo aquí que NUNCA hay que echar agua para apagar un fuego de aceite hirviendo. Entiendo que en esos momentos de nerviosismo lo haces de manera instintiva, pero recordad: AGUA NUNCA.