Soplándose el dedo pulgar No se si es un nuevo reto o qué pretendía. En cualquier caso mucho cuidado, que mira cómo ha acabado…
La despedida de soltero de ayer tuvo que ser brutal Suerte que tiene amigos de verdad que sujetan ayudan en momentos importantes.
Tranqui, que controlo y conozco la zona Me ha recordado al día que circulé por la carretera de Sa Calobra, en Mallorca. Iba acojonado pero no por mi, sino por los autobuses que me cruzaba, que iban a toda leche (la confianza de conocerse el camino).
Va a ser un largo y tortuoso camino hasta llegar a casa Sube el volumen, que la marcha que le acompaña no tiene desperdicio.