Nació el 2 de enero de 1903. Para que os hagáis una idea, Tanaka tenía 11 años cuando comenzó la Primera Guerra Mundial y 36 cuando comenzó la Segunda. Cuando se estrenó Star Wars tenía 74 y cuando comenzó la pandemia 116 años. También ha sobrevivido a un cáncer de colon que padeció a los 103 años. A día de hoy, es la mujer más anciana del mundo, con 118 años.
Los últimos récords de longevidad los ostentaron la francesa Jeanne Calment, que murió en agosto de 1997, y la estadounidense Sarah Knauss, fallecida en diciembre de 1999, ambas también con 118 años.
Freddie Mercury y Diego Armando Maradona tuvieron un inolvidable encuentro hace casi 40 años, en la única gira de Queen por Argentina (con Freddie vivo). Era el 8 de marzo de 1981 y Mercury invitó a Maradona a subir al escenario, diciendo: «I’d like to introduce a friend of yours: Maradona».
Diego Armando, ya en el escenario, le respondió: «Le quiero agradecer a Freddie y a los de Queen por hacerme tan feliz». Inmediatamente después anunció el siguiente tema: «Y ahora, Otro muerde el polvo» («Another one bites the dust»).
El músico y el astro argentino intercambiaron aquel día las camisetas de sus respectivas selecciones en un gesto de fraternidad en los camerinos.
Aparte de estas fotografías, también hay documento (sonoro) de aquella noche mágica:
El retablo pintado al óleo de 1455 «Tríptico del altar de Santa Columba», concretamente en la tabla central «Adoración de los Reyes Magos» incluye un tremendo spoiler (por no llamarlo fail épico). Veámoslo con más detalle:
¿Lo has averiguado? ¿No lo pillas?. Bueno, si te das por vencido, ahí va:
¡Tremendo viaje en el tiempo! ¿Dónde está aparcado el Delorean?
A finales del año 1990, una nueva película deSuperman aparecía sobre la mesa: Superman Lives. Un proyecto mastodóntico que, a los pocos meses, entraba incluso en fase de pre-producción.
Tim Burton, que había conseguido convertir en un exitazo a Batman (1989), sería el elegido para dirigirla. El papel protagonista lo asumiría Nicolas Cage, fan incondicional de Superman que no podía estar más emocionado con la idea. Todos tenían sus contratos firmados y la cosa estaba en marcha.
Pero poco después, Warner Bros. decidía cancelar el proyecto justo cuando iba a dar comienzo su rodaje. Los elevados costes y un guión que no convencía fueron los principales motivos. Aún así, existen documentos gráficos, como esta prueba de vestuario que no tienen precio:
La obsesión de Nicolas Cage por Superman llega hasta el punto de tener una colección de cómics valorada en millones de dólares. De hecho su hijo se llama Kal-El. Imaginaos el mazazo que supuso para él la cancelación de la película. Posteriormente declaró en una entrevista: «Tenía muchísima fe en aquel proyecto y en lo que Tim Burton había planeado. Me habría encantado verla, pero en cierto modo creo que hemos salido ganando con el hecho de que no exista. Ahora la gente puede imaginar cómo podría haber sido y esa imagen es más fuerte que la película misma».