Mientras tanto, en un puesto de helados de esos que te trolean… A este pequeñajo se le agotó la paciencia.
A las avispas no les gusta el rap Recordadme apuntar en mi lista negra de países no visitar nunca Bangladés. Allí te inspiras un poco rapeando y te ataca un enjambre de avispas como gorriones de grandes.